La vida no nos mira a todos de la misma forma. A algunos les sonríe, a otros les guiña un ojo y a otros, simplemente los mira de reojo.
También es verdad que hay muchas personas a las que la vida les sonríe y ellos no lo saben ver.
A María, Salvador y a sus gemelos, por el contrario, la vida les ha mirado de reojo, pero ellos la miran de frente y le plantan cara. Para mí son unas personas maravillosas y me enseñan a ver la situación de Martí con otros ojos.
Salva tiene 10 años y también padece Síndrome de Dravet. Lleva unos meses muy malito. Esta maldita enfermedad no le da tregua. Lo machaca cada día un poco más.....pero Salva es un verdadero héroe y su madre, una MADRE EXTRAORDINARIA. Hablar con ella, a pesar de tener a su niño en el hospital en estado comatoso, te da fuerza, te transmite serenidad y esperanza. Es una mujer increíblemente fuerte.
Publico esto únicamente porque ha salido un artículo en el que ellos hablan de la situación y me gustaría que le echarais un vistazo. Dedicadle unos minutos, es muy emotivo y creo que transmite la fuerza y el amor de esta familia.
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